La pérdida de un ser querido es una de las experiencias más difíciles y dolorosas de la vida. Además del dolor emocional, esta situación implica una serie de responsabilidades legales y financieras que pueden resultar abrumadoras, pero que deben ser abordadas de manera adecuada.

Con esta guía completa, queremos brindarte apoyo en este momento tan delicado. Comprender el complejo mundo de las herencias en España te permitirá tomar decisiones informadas sobre la planificación financiera y patrimonial, navegando de manera más segura por el proceso de sucesión.

I. El papel del testamento

Para entender el funcionamiento de las herencias, es fundamental comenzar por el documento más importante: el testamento. Este trámite es relativamente sencillo, ya que sólo requiere visitar la notaría, presentar el DNI y especificar quiénes serán los herederos y cómo se distribuirá el patrimonio.

Es crucial asegurarse de que quede registrado el lugar, la fecha y la hora en que se otorga el testamento. Además, hay que tener en cuenta que este proceso conlleva ciertos aranceles regulados por el Real Decreto 1426/1989, que establece el Arancel de los Notarios.

Tipos de testamento

Cada tipo de testamento presenta sus propias características y requisitos legales, por lo que se debe considerar cuál se ajusta mejor a las necesidades y circunstancias del individuo.

Se divide principalmente en dos categorías: la común, que abarca los subtipos que se verán a continuación, y la especial, que se utiliza en ocasiones sumamente particulares como la militar, marítima y los realizados en el extranjero.

Testamento ológrafo

Es aquel escrito de puño y letra por el testador sin necesidad de intervención notarial. Este tipo de testamento tiene una validez de cinco años a partir de la fecha de fallecimiento, siempre que cumpla con los requisitos legales establecidos.

Testamento Abierto

El testador manifiesta vervalmente su voluntad, la cual es registrada por el notario. En caso de ser necesario, este proceso puede contar con la presencia de testigos. Es el tipo de testamento más común en España.

Testamento cerrado

El testador presenta un documento sellado con su última voluntad ante el notario, quien lo guarda en secreto hasta después de su fallecimiento.

¿Cómo se puede impugnar un testamento?

Se puede cuestionar la validez de un testamento por diversas razones, como la falta de capacidad mental del testador al momento de su elaboración, coacción o fraude.

Para llevarlo a cabo, se debe interponer una demanda ante el juzgado correspondiente y proporcionar pruebas que sustenten la objeción dentro de un plazo máximo de 15 años despues desde que se conoce el documento.

II. La herencia y su repartició

Una herencia se refiere a los bienes, derechos y obligaciones que una persona transmite a sus herederos designados en un testamento tras su fallecimiento.

En ausencia de este documento o de herederos, el Estado asume la administración de los bienes conforme a las leyes de sucesión intestada, pudiendo en casos especiales destinarlos a fines benéficos o públicos.

El Código Civil brinda la facultad de designar a los herederos legales de forma libre, pero con ciertas restricciones en cuanto a porcentajes. Esta división se compone de tres partes:

Tercio legítimo

Se distribuye equitativamente entre los herederos forzosos, es decir, aquellos que tienen derechos establecidos por la ley. Generalmente , suelen ser los hijos y descendientes, seguidos por los padres, y en ausencia de estos últimos, el conyuge.

Tercio de mejora

Destinado también a los familiares directos, pero sin la obligación de repartir los bienes de manera igualitaria.

Tercio de libre disposición

El testador dispone libremente de sus bienes para designar a cualquier beneficiario, ya sea persona física o jurídica.

Cabe mencionar que la desheredación de parientes sólo puede ocurrir en casos graves, como la pérdida de la patria potestad por incumplimiento de deberes parentes o conyugales, así como por causas criminales o matrimoniales; el atentado contra la vida del fallecido o la infingencia de un maltrato físico y/o psiquico extremo.

III. Proceso de sucesión

  1. Obtención del certificado de defunción
    Para iniciar el proceso de sucesión, es necesario conseguir este documento que acredita la muerte del individuo y es emitido por el registro civil correspondiente al lugar de fallecimiento.
  2. Testamento y declaración de herederos
    Una vez hayan pasado 15 días desde el fallecimiento, es posible solicitar el Certificado de Actos de Última Voluntad, el cual permite verificar si el difunto dejó un testamento y conocer su ubicación.
    En caso de existir este documento, deberá presentarse ante el notario correspondiente, quien llevará a cabo su apertura y lectura. Por otro lado, si no hay testamento, se procederá a la declaración de herederos legales mediante un procedimiento judicial.
  3. Inventario de bienes y deudas
    Se debe realizar un inventario detallado de todos los activos y pasivos dejados por el fallecido, además de valorarlos. Esto incluye propiedades, cuentas bancarias, inversiones, vehiculos, joyas, entre otros bienes, así como también las deudas pendientes, como préstamos, hipotecas o impuestos.
  4. Aceptación o renuncia de la herencia
    La aceptación puede ser ura y simple, donde el heredero asume tanto los activos como los pasivos del fallecido, o a beneficio de inventario, limitando su responsabilidad sobre las deudas únicamente a los bienes obtenidos.
    Por otro lado, la renuncia puede ser pura y gratuita, lo que permire que los parientes del grado siguiente hereden por derecho propio, o traslativa, donde el beneficiario acepta en primera instancia la herencia para luego cederla a personas específicas.
    También se puede optar por ejercer el derecho a deliberar, solicitando ver los bienes antes de tomar una decisión. Se dispone de un plazo de 30 días para ello.
  5. Liquidación del impuesto de sucesiones.
    Los herederos deben liquidar el impuesto de sucesiones en un lapso de seis meses ante la Agencia Tributaria. Este gravamen recae sobre la transmisión de los bienes heredados y su monto varía según el valor de los mismos y el grado de parentesco entre el fallecido y los beneficiarios.
  6. Reparto de la herencia
    Una vez pagado el impuesto correspondiente, se procede al reparto de la herencia según las disposiciones del testamento o las leyes de sucesión intestada.
  7. Traspaso de bienes y registro de la herencia
    El traspaso de bienes puede implicar la venta de propiedades, el cambio de titularidad de cuentas bancarias o la transferencia de otros activos. Además, es necesario inscribir la herencia en el Registro de la Propiedad para garantizar la seguridad jurídica de los nuevos propietarios.

Conclusión

Heredar puede ser un proceso complejo, pero con la información y la planificación adecuada, se puede evitar problemas y asegurar que la voluntad de tu ser querido se cumpla.

Recuerda que esta guía es solo un punto de partida. Si deseas obtener orientación precisa sobre tu caso, no dudes en acercarte a nosotros y compartir tus dudas. nuestro equipo de abogados está comprometido con proporcionarte la tranquilidad y seguridad que necesitas durante este difícil período.

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